27 de febrero de 2008

Frase de la Semana:

“Hay que tomar la libertad como una ley natural que se extiende hacia toda forma de vida, así como vemos morir a los animales cuando se les quita la libertad. Este es un testimonio fiel que la Supervisión General no acepta la esclavitud de ninguna criatura...
“…Sin embargo, antes de pedir la libertad, tenemos que asegurar que tenemos la capacidad de actuar libremente, con libre elección.

(Yehuda Ashlag, “La Libertad”).

24 de febrero de 2008

Desarrollar el Altruismo.

En el post Las formas de aprehender la Realidad. Mencionamos el termino “Altruismo”, allí dijimos: “La Torah nos enseña la forma correcta de relacionarnos con el deseo: Altruismo, es como pasar del deseo egoísta al altruismo”.

Altruismo es el afán de procurar el bien del prójimo aun a costa del propio. Únicamente a través de este gran esfuerzo la humanidad puede alcanzar la verdadera justicia y su armonía.

Altruismo es la cualidad de lo completo, la fuerza a través de la cual alcanzamos nuestra Esencia denominada en el lenguaje de Israel Hakadosh Barúj Hú, la suprema conciencia e identidad de toda la realidad en «donde» todos «somos Uno». Nuestra conciencia del Yo, Anojí, así como la de la Esencia, mientras permanecemos identificados únicamente con el ámbito material-sensorial nos son completamente ajenas, dado que conocer nuestro Yo y conocer la Esencia es lo mismo. Conciencia es la propiedad del alma de ir re-conociéndose en Hakadosh Barúj Hú, ya que «allí está» su origen e identidad.

Él es la Fuente Infinita de altruismo sin una pizca de deseo de recibir, ya que ¿de quién ha de recibir? Lo verdaderamente Infinito que hay en el hombre, el altruismo, no se manifiesta automáticamente, sino que está latente en nuestro interior aguardando que deseemos y logremos crear las condiciones adecuadas para revelarse. Esto es similar al talento con el cual nacemos. Cada niño viene al mundo con una potencialidad, lo que tiene para dar de sí, como la semilla que contiene en potencia todo el árbol y los frutos que a través de él surgirán.

Cuando la Torah es aprehendida de acuerdo a su mecanismo educativo, o sea sin distorsión, entonces alcanzamos el altruismo que logra activar el potencial humano, el talento para el bien. Cuando una cultura, una filosofía o una forma de vida genera una percepción parcial de la realidad, ignorando los valores espirituales, está destinada a desaparecer, ya que se basa en parámetros que no responden a la esencia humana. La auténtica naturaleza del hombre y la única forma de lograr la justicia es a través del altruismo.

Para que sea completo, el altruismo debe ser desarrollado en cada una de las tres áreas de interacción humana: con Di-s, con los semejantes (siendo la relación matrimonial su forma más personal e intensa) y con uno mismo.

Con respecto a Di-s, el altruismo implica la humilde sumisión a Su voluntad. Con respecto a la esposa, encontrar en el cónyuge el alma gemela predestinada y relacionarnos con el o ella a este nivel. Con respecto a uno mismo, significa refinar el carácter.

Nuestra conciencia diaria o habitual, de acuerdo a Kabbalah, es sólo una pequeña parte de la conciencia del alma, la que contiene niveles adicionales y formas de conciencia que en general no conocemos.

Se dice que estos niveles adicionales nos “rodean” o abarcan, ya que normalmente no está en nuestro focalizarnos en ellos, mientras que la conciencia normal o regular está “dentro” nuestro, denotando que podemos acceder a ella y controlarla en mayor medida.

Los niveles abarcadores son vistos como “superiores” y más “distantes”, ya que generalmente están más allá de nuestra captación o comprensión, mientras que los niveles internos son "inferiores" o más "próximos" a nuestro campo de alcance.

En general, los tres aspectos del esfuerzo espiritual requerido para cultivar el verdadero altruismo abarcan las tres grandes divisiones de la conciencia: la “conciencia abarcadora distante”, “la conciencia abarcadora cercana” y la “conciencia interior”. En Kabbalah se conocen con los términos en hebreo “or makif rajok”, “or makif karov” y “or pnimi”, respectivamente.


La Biblia usa cinco términos para referirse al alma, en Kabbalah aprendemos que son los cinco niveles de conciencia del alma: Cinco nombres tiene el alma y éste es su orden de lo inferior a lo superior: Néfesh, Rúaj, Neshamá, Jaiá y Iejidá.Shaar haGuilgulím, “El Pórtico de las Rotaciones del Alma”, tal como lo recopiló el Rabino y Kabbalista Jaím Vital según lo recibió de su maestro el Rabino y Sabio Kabbalista Itzják Luria Ashkenazi, conocido como el Ariz’al, lee el post Palabras del Rabino y Sabio Kabbalista Jaim Vital.

Dos de estos cinco niveles son “abarcadores”, que rodean desde el exterior y tres “internos”. Véase la figura.

El origen de cumplir la voluntad de Di-s es la devoción absoluta a Él, inherente al más alto de los cinco niveles del alma, la Iejida. Esta es la esencia simple de la conciencia, que no reconoce sino la realidad absoluta y todo abarcadora de Di-s.

En la práctica raramente somos conscientes de este nivel del alma, usualmente funcionamos en el contexto de los deseos y motivos de corto alcance.

Pero todos nuestros deseos se reducen en definitiva a la voluntad de existir (o de enriquecer o expandir nuestra existencia). Este deseo a su vez está basado en y permeado por el placer experimentado (o imaginado) al existir, que en si mismo está basado en la fe de que la existencia es real.

Por cuanto que la única realidad verdadera es Di-s, la Iejidá reconoce a Di-s como su fuente única de placer y el objetivo de su voluntad y deseos. Esto está subyacente en todos los pensamientos concientes. Por eso se dice que la Iejida siempre está revoloteando, “circundando” y motivando nuestra percepción conciente e influenciando a la distancia nuestro proceso de toma de decisiones.

La capacidad de reconocer nuestra verdadera alma gemela deriva de Jaiá, el segundo nivel del alma. Aquí es donde se manifiesta la sabiduría (jojmá) innata del alma. Está también normalmente fuera de la esfera de la percepción normal y sólo se revela ocasionalmente como destellos de entendimiento inspirados divinamente. Pero como penetra la mente conciente más frecuentemente que la Iejida, es descripta como rodeando más de cerca nuestros pensamientos concientes.

Aunque todo destello de entendimiento es una experiencia de nuestra Jaiá, es fundamental comprender que el alma de cada uno deriva de un origen común a todas las otras almas, como está dicho (Malají 2:10): “¿Acaso no tenemos todos un solo Padre?” El caso más personal de esto es el reconocimiento del alma-raíz que uno comparte con su esposa (Jaiá, como nombre propio, es la rectificación de Javá. Eva es la primera mujer, que recibió ese nombre (en lugar de Jaiá) a causa del pecado original. Jaiá es entonces un nombre genérico de la consorte espiritual verdadera en su estado de mayor perfeccionamiento).

El proceso permanente de auto rectificación y refinamiento del carácter incluye relacionarse con los demás con un genuino amor bondadoso y altruista, a la vez que se realiza el máximo esfuerzo por anular todo motivo egoísta o interesado. Este esfuerzo concentrado de la mente y el corazón involucra los tres niveles concientes interiores del alma, la Neshamá, el Rúaj y el Nefesh.

En particular, la Neshamá es el nivel de la mente (la inteligencia activa del alma); el Rúaj es el nivel del corazón (los atributos emocionales) y el Nefesh es el nivel de acción, en general y de los rasgos de comportamiento innatos, en particular.

A través del esfuerzo espiritual concentrado, uno puede refinar su habilidad de percibir la realidad verazmente y en profundidad, sensibilizar su corazón para reaccionar apropiadamente al fenómeno de la vida y adquirir una “segunda naturaleza” rectificada al llegar a la acción y el comportamiento.

Ahora, está el principio general que “cuando más elevada es una entidad, más bajo desciende” (Likutei Torah 2:34c). Por eso, hemos estudiado en Kabbalah que el nivel más elevado del alma, la Iejida, el origen en la conciencia de nuestro empeño en cumplir la voluntad de Di-s se manifiesta en mayor medida en el nivel más bajo, el Nefesh, a través del incremento individual de las buenas acciones.

El segundo nivel del alma, la jaiá, la perspicacia de reconocer la unidad esencial de todas las almas judías- se manifiesta en el segundo nivel más bajo, el rúaj, al rectificar nuestras emociones y aprender a relacionarnos con los demás con cariño.

Esto deja a la Neshamá como el eje central del alma.

Y, por cierto, el foco primario de nuestro esfuerzo espiritual respecto al alma es la Neshamá, que comprende el intelecto maduro y el poder de percepción de la aparentemente separada realidad. A través de la meditación concentrada, se puede entrenar la mente para percibir la realidad correctamente, tanto con respecto a ver la presencia de Di-s en el mundo, la Divina providencia, como a comprender a las demás personas y sus interrelaciones.

Mediante un esfuerzo espiritual concentrado, uno puede refinar su habilidad de percibir la realidad con profundidad y de verdad, sensibilizar su corazón para reaccionar en forma apropiada al fenómeno de la vida y adquirir una “segunda naturaleza” rectificada en el momento de actuar y conducirse. Nuestra percepción de la realidad refinada (Neshamá) dará origen a emociones rectificadas en el corazón (rúaj), inspirado por el jaiá, quienes a su vez motivarán el incremento continuo de las buenas acciones (Nefesh reflejando a Iejidá).

Bibliografia:

El misterio del matrimonio del Rabino Itzjak Ginsburgh.
La Esencia, el Infinito y el Alma. Rav. Zukerwar.


21 de febrero de 2008

Shma Israel. Sarit Hadad



Para mis alumnos del grupo Martes.


SHMA ELOHAI

Ksheh halev bocheh
rak elohim shome'a
Hake'ev ole mitokh haneshama
Adam nofel lifnei shehu shoke'a
Bitfila ktana chotekh et hadmama
Shma Israel elohai
ata hakol yakhol
Natata li et chayay
natata li hakol

Be'enai dim'a
halev bokhe besheket
Ukhshe halev shotek
haneshama zo'eket

Shma Israel elohai
akhshav ani levad
Chazek oti elohai
aseh shelo efchad

Hake'ev gadol
ve'ein le'an livro'ach
Ase sheyigamer ki lo notar bi ko'ach

Kshehalev bokhe,
hazman omed milekhet
Ha'adam ro'eh et kol chayav pitom
El halo noda hu lo rotze lalekhet
Le'elohav kore al saf tehom.


19 de febrero de 2008

Las formas de aprehender la Realidad.

“Cuatro Sabios «entraron» al (Huerto) PaRDéS: Ben Azái, Ben Zomá, Ajer (Elishá Ben Abúya) y Rabí Akiva…Ben Azái vio y murió, Ben Zomá observó y enloqueció, Ajer cortó las amarras, Rabí Akiva salió en paz”. Talmud Babli Tratado Jaguigá 14.2

Este es quizás uno de los pasajes más famosos y maravillosos del Talmud. Este tiene múltiples interpretaciones, sobre todo Kabbalísticas, y la mayoría de los estudios concuerdan en tomar esta cita como prueba que Rabí Akiva estudiaba los textos secretos esotéricos.

Querido lector, es fundamental destacar que nada de lo dicho a continuación debe ser tomado al pie de la letra ya que, sin duda, el texto sugiere niveles de comprensión que superan por completo los objetivos de este Blog, si te quedan dudas, o te generan inquietudes como siempre les digo, dejen sus comentarios. Pero si te pido que leas con detenimiento.

¿Por qué solamente Rabí Akiva logró entrar y salir en paz? En cuanto a los otros tres Sabios ¿por qué uno perdió la vida, el segundo perdió la razón y el tercero corto las amarras (perdió la comprensión superior abandonando el camino de la Torah)? Para descifrar estos interrogantes debemos saber previamente qué es el mencionado “PaRDéS”, y qué percibió cada uno de estos Sabios.

El vocablo PaRDéS פרדס significa literalmente Prado, Huerto. Este concepto, que aparece en diversos textos tradicionales, alude a las cuatro formas básicas de comprensión de la realidad, las cuatro formas básicas de interpretación de la Torah. 

Las letras de dicha palabra conforman cuatro perspectivas a través de las cuales comprendemos la Torah.

La primera inicial del vocablo PaRDéS, פרדס - indica el Pshat, lo simple, el relato literal de la Torah. 

La segunda inicial alude al פרדס Remez, insinuación, que le da una dimensión más profunda al relato, dado que los personajes, las situaciones y todos los detalles presentados por la Torah, inclusive las letras, nos transmiten un mensaje.

La tercer inicial פרדס nos indica el Drash que proviene del verbo exigir (לדרוש). Esta lectura encierra una búsqueda en la cual el hombre exige el significado interior que el texto quiere transmitir. 

La última inicial del Pardés פרדס nos indica el Sod, literalmente secreto. El Zóhar, uno de los libros fundamentales de la Sabiduría de la Kabbalah, define al Sod como causa, ya que quien conoce la causa conoce la consecuencia, es decir el “secreto”. El Sod nos revela los principios espirituales que rigen todos los ámbitos de la realidad.

Bien los cuatro Sabios Ben Azái, Ben Zomá, Ajer y Rabí Akiva nos indican cuatro formas generales de comprensión a que los hombres son proclives de arribar cuando quieren alcanzar la Plenitud de todo lo creado.

Ben Azái vio y murió… Este Sabio pensó que anulando la relación con el mundo material-sensorial el hombre alcanza el objetivo para el cual fue creado. 

La realidad material-sensorial es nociva cuando se transforma en un fin en sí misma, es decir cuando vivimos solo para ella, entonces se convierte en la fuente de todos los sufrimientos. En cambio, cuando la tomamos como un medio se transforma en el instrumento para que la Plenitud Infinita se expanda en todos los ámbitos de la realidad. Ve Contacto con lo Sagrado. Parte II.

Vivimos en dos mundos, en este y el futuro. Aún en este mundo (y estas afirmaciones anteriores son lo más simplificadas posible) vivimos en dos planos, el nivel inferior físico del cuerpo y el nivel superior y espiritual del Alma. Esto nos los enseña la Torah. Este plano material-sensorial, fue creado por D’os, todo lo que en él existe sirve como instrumento para descubrir y servir a D’os, la esencia de la Santidad es saber usar correctamente todo cuanto existe en el mundo según el plan de D’os. 

La Torah no nos pide anular el deseo, ya que el deseo es el recipiente para recibir la plenitud (sin él no podemos disfrutar) el deseo es nuestra cualidad esencial, y es nuestra esencia, es lo que nos guía, lo que nos hace funcionar, siempre estamos buscando satisfacer nuestros propios anhelos. Como escribió el Rav Ashlag, el hombre no mueve ni un solo dedo si no lo mueve un deseo interno. 

La Torah nos enseña la forma correcta de relacionarnos con el deseo: Altruismo, es como pasar del deseo egoísta al altruismo, esta es la Torah. 

Ben Azái obvió el potencial que surge al confrontarnos con el desafío de armonizar todos los planos y aspectos de la realidad, lo cual hace fluir la plenitud a toda la Creación.

Ben Zomá observó y enloqueció… Su intuición e imaginación fueron más poderosas que su discernimiento. Ben Zomá fue un Sabio que se dedicaba a analizar decenas de veces un concepto hasta comprenderlo en sus detalles e implicancias más recónditas. 

Es imposible que el hombre aprehenda intelectualmente la medida de todo, ya que la realidad del Kadósh Barúj Hú es infinita (Ein Sof). 

El verdadero conocimiento espiritual trasciende todo límite. El acceso a la realidad espiritual es posible únicamente cuando trascendemos el ámbito de lo mensurable. 

En el ámbito espiritual conocimiento es fusión en hebreo dvekút. Dvekút es lo que unifica al conocedor con el conocimiento y lo conocido. Para lograr la dvekút no es suficiente la especulación intelectual, es necesaria la vivencia, que se alcanza mediante el estudio de las leyes espirituales, la Torah, y la práctica de actos de bien: las Mitzvot. De esa forma el hombre recrea en su vida la Realidad Infinita.

Esto es similar al amor que para ser completo debe estar por sobre toda medida. Mientras medimos aún no hay amor, hay conocimiento. Sólo cuando trascendemos la medida llegamos a la entrega, al amor, que está más allá de todo límite. 

Entonces pasamos del conocer al ser.

Ajer perdió la comprensión superior abandonando el camino de la Torah… Elishá Ben Avuya, es su verdadero nombre, pero en el Talmud se le llamo “Ajer” (“el otro”) evitando de tal modo hasta la mención de su nombre, porque abandonó el camino de la Torah en busca de lo que él consideraba ir al encuentro de “la verdad”. 

Cuando el discernimiento es usado para justificar la debilidad humana en su manifestación negativa en lugar de superarnos en pos de lo completo, “el altruismo”, transformar nuestro deseo egoísta de recibir para si mismo, en el deseo de recibir para dar, perdemos el objetivo (de esto hablaremos más abajo). 

Este Sabio, influenciado por los griegos, no se sabe a ciencia cierta qué ideas lo conquistaron, tal vez el helenismo, quizá el dualismo o el hedonismo, pero realizó su discernimiento acorde al pensamiento filosófico basado en el intelecto, el cual se basa en adaptar las normas de conducta a las debilidades humanas.

En cambio, cuando actuamos en base a principios objetivos-Mitzvot, se activa armónicamente todo el potencial humano transformando el deseo de recibir inconsciente en voluntad consciente.

Mientras más justifiquemos intelectualmente nuestro egoísmo, mas lejos estamos del objetivo.

Rabí Akiva entró en paz, y salió en paz…Rabí Akiva logró la comprensión que nos permite armonizar la relación entre lo general y lo particular, el objetivo y la forma para lograrlo. 

Según la Kabbalah la función del pensamiento consiste en discernir entre nuestros deseos, previendo las consecuencias de nuestros actos.

Cuando pensamos no hacemos más que racionalizar nuestras necesidades, anhelos, deseos y en última instancia nuestra voluntad. Pero para tomar la decisión de concretizar o no nuestros deseos, cuándo y de qué forma, debemos confrontarlos a un objetivo. Sólo después de esto puede surgir la posibilidad de elegir y desarrollar la voluntad. 

El objetivo nos hace tomar conciencia de nuestro deseo y sólo así podremos generar la voluntad para canalizarlo correctamente. 

El deseo es innato e inconsciente, en cambio la voluntad es consciente y adquirida. 

El deseo en su forma instintiva es denominado por la Kabbalah “ratzón lekabel”, deseo de recibir, egoísmo. En cambio, a través del trabajo consciente en la Torah y las Mitzvot se lo puede transformar en deseo de dar, altruismo, en hebreo “ratzón lehashpia”.

Es decir que el cumplimiento consciente de los preceptos, moldean al hombre.

La voluntad y el deseo limitan o expanden la realidad de los hombres, ya que son ellos los que le dan al pensamiento el marco donde actuar y desarrollarse. 

Esto es determinante hasta tal punto que grandes Sabios, pueden quedar cautivados en diferentes ámbitos de la comprensión; limitando así su percepción de la realidad.

Los cuatro Sabios que nos describe nuestra tradición representan cuatro formas de comprender la Sabiduría de la Kabbalah y por lo tanto de aprehender la realidad, en donde sólo la cuarta conduce a la verdadera conciencia. 

Solamente en ese cuarto ámbito, el Sod (nivel de la Kabbalah), el hombre puede lograr la libertad; siendo que al aprehender las causas comienza a comprender las consecuencias, descubriendo así en todos los aspectos de la vida al Uno sin segundo, al Kadósh Barúj Hú.

Leíste.

Respóndete a ti mismo estas preguntas. 

¿Por qué solamente Rabí Akiva logró entrar y salir en paz? 

¿Por qué uno perdió la vida, el segundo perdió la razón y el tercero corto las amarras (perdió la comprensión superior abandonando el camino de la Torah)?

¿El mundo material-sensorial es un instrumento para alcanzar El Objetivo?

Si respondiste la pregunta anterior ¿Cuál es El Objetivo?

¿Qué es deseo?

¿Cómo se relacionan según la Kabbalah el Deseo y la Voluntad?


Bibliografía.

Adaptación basada en los textos:

La Percepcion Judia de la Realidad. Rab Jaim Zukerwar.

La Esencia, el Infinito y el Alma. Rab Jaim Zukerwar.

17 de febrero de 2008

frase de la semana.

"Rabbi Shimon Bar Yojai dijo: Todo lo perdona
El Santo Bendito Sea excepto Lashon hara"
Zohar, Shelaj 161

Contacto con lo Sagrado. Parte II.


El Alef-Bet. Sentir el Mundo Superior.

Hemos dicho en que el mundo fue creado con las letras. Si no has leído el post “El Contacto con lo Sagrado. Parte I.” haz click sobre el titulo, léelo y luego vuelve, es corto.

En el libro titulado “Shemoneh Essre” del Rabino Abraham Feuer encontramos un párrafo que sintetizaría lo que desarrollamos en el post “Contacto con lo Sagrado”: “El Alefato hebreo, las veintidós letras Sagradas son fuerzas espirituales profundas esenciales; la materia prima de la Creación” a través de estas canaliza la Luz hacia nuestro mundo.

En el Sefer Yetzirah, el patriarca Abraham describe como se utilizaron las letras Sagradas como agentes de la Creación. Este Sefer es muy antiguo y esta escrito en el lenguaje de Sefirot, Partzufim, es el primer libro de la Sabiduría de la Kabbalah, y una excelente herramienta para estudiarlo es el conocido comentario “Sefer Yetzirah” del Rav Aryeh Kaplan.

En la introducción del Zohar, escrita por el mismo rabí Shimon. Se encuentra el “Artículo de las Letras” llamado “Otiot De Rav Himmona Saba”. En él rabí Shimon explica la forma de cada letra, el atributo de cada una y por qué las letras tienen un cierto orden de Alef a Tav. También explica el propósito de tener letras intercambiables, porque las letras se conectan a una palabra de cierta manera, y cómo una palabra se torna en una cierta secuencia de acciones. Este fragmento del Zohar, está publicado en este blog exactamente debajo

Hay veintidós patrones por los cuales somos activados si sabemos cómo responder correctamente. Estas veintidós letras están en nosotros y responderemos correctamente cuando reconozcamos “la sabiduría de la dirección superior y supervisión de estas letras”

Leer las letras no es como leer una historia, sino que es necesario saber cómo adquirir sus veintidós atributos. Entonces, cuando una persona lee las palabras coloca sus letras internas sobre los símbolos externos y se incluye en el texto. Entra en la sensación del Mundo Superior, uniéndose y encontrándose con el autor en aquel lugar en donde el autor compuso una y cada letra del libro.

Un stop: Nótese que usamos el término “sensaciones” normalmente se refiere a las impresiones que las cosas producen por medio de los cinco sentidos. Pero a lo largo de la historia hemos descubierto que la percepción de la realidad a través de los sentidos no es suficiente y constantemente cometemos errores.

“Sentir” se refiere a Experimentar sensaciones producidas por causas externas o internas, pero estas “sensaciones” de las que vamos a hablar en las próximas líneas no se refieren a las que percibimos a través de los sentidos.

Una persona que adquiere estos veintidós patrones o vehículos espirituales podrá leer el Zohar y experimentar las mismas sensaciones, las mismas impresiones que Rabí Shimon Bar Yojai sintió cuando estaba escribiendo el libro.

Cada Letra representa cierto atributo de un poder superior al hombre, o la respuesta del hombre a la Fuerza Superior. Cada una de las letras marca un cierto espacio en el cual yo puedo comprender el mundo que me rodea.

Para ganar la verdadera sensación de la Realidad completa, la cual está afuera del ámbito de nuestros cinco sentidos, nosotros debemos estudiarla correctamente. Entonces, cuando lo hagamos, y deseemos comprenderla, un nuevo y amplio mundo se abrirá para nosotros.

Este nuevo mundo se llama el “Mundo Superior” ó “Mundo Espiritual”; pronto comenzaremos a sentirlo.

Al llenar el alma de la Luz le da al hombre esta sensación del Mundo Superior. Esto significa que él puede vivir simultáneamente (sentir) en ambos, el Mundo Superior y el nuestro. Él une estos dos mundos en él. El estado en que se maneja completamente en nuestro mundo y corrige y llena su alma al nivel espiritual más alto, es llamado el Extremo de la Corrección de un Alma o simplemente el Extremo de la Corrección.

A través de la Sabiduría de la Kabbalah podemos estudiar el método para revelar los poderes de la Realidad en general; esas fuerzas que supervisan y administran la realidad entera.

11 de febrero de 2008

Frase de la semana.

El Rabí Yehuda Ashlag dijo: "Nuestro estado puede ser comparado al estado del hijo del Rey, quien fue puesto por su padre en un palacio lleno de toda clase de tesoros, pero sin la Luz necesaria para poder verlos. Entonces, el hijo se queda sentado en la oscuridad y solamente le falta la luz para poseer tales riquezas. Él incluso tiene una vela consigo (el Creador le envía la posibilidad de comenzar a avanzar hacia Él), como está dicho: 'El alma de un ser humano es la vela del Creador', uno solamente necesita encenderla por su propio deseo."

Sobre el mismo tema, añadió: "Aunque se dice que la meta de la Creación es incomprensible, hay una gran diferencia entre la incomprensión del hombre sabio, y la ignorancia del tonto.”

La Obra del Baal HaSulam.




Te invito a leer este post ampliado, haciendo click en la siguiente dirección:
http://oreinsof.blogspot.com/2010/06/la-obra-del-baal-hasulam-i-parte.html

El rabino Yehuda Leib Ha-Levi Ashlag (1885 - 1954) también conocido como Baal HaSulam (En Hebreo "Autor de la escalera") en referencia a su obra maestra.
Era un rabino ortodoxo nacido en Varsovia, en el imperio ruso, pertenecía a una familia de académicos conectados a los Tribunales Jasídicos de Porisov y Belz.
El Rabino Ashlag vivió en Jerusalén desde 1922 hasta su muerte en 1954.
Es considerado un gran Kabbalista, su comentario sobre el Zohar, “El Sulam” fue su principal trabajo, y “Talmud Eser Sefirot” es un texto importante de estudio para muchos estudiantes de la Kabbalah.
Talmud Eser Sefirot es una completa re-edición y comentario de las obras del siglo 16 del Rabino Kabbalist Isaac Luria, conocido como el Ari, Tzl. Se trata de una amplia exposición del sistema de los mundos, Partzufim y Sefirot, en el lenguaje científico de la Kabbalah que ha sido desarrollada por el Arí, Tzl.
Un extracto de la introducción de esta obra:
“Si escuchas con tu corazón una famosa interrogante, estoy seguro que todas tus dudas sobre si debes estudiar Cabalá desaparecerán sin dejar rastro. Esta pregunta amarga y justa la hacen todos los que nacen en esta Tierra: ¿Cuál es el propósito de mi vida?” Introducción al Talmud Eser Sefirot
Como uno de los principales textos Kabbalistas es especialmente único en su precisión en los detalles de la organización estructural y los procesos que ocurren en los mundos superiores. Es un libro de texto, completo con sus comentarios, una sección en cada capítulo dedicado a un examen más a los comentarios, las definiciones de los términos, preguntas y respuestas, una introducción aclarando cómo estudiar Kabbalah en la forma correcta, y también Prefacio y un resumen de todo el texto.
Su otra obra maestra fue su comentario sobre El Zohar, El Sulam, que le valió el nombre de "Baal HaSulam" como dijimos al principio. Este monumental trabajo le llevó diez años en completarse, fue escrita entre los años 1943 y 1953. Y en él se incluye una traducción de El Zohar del arameo al hebreo, así como una extensa interpretación.
Otra publicación es el cuaderno de Yehuda Ashlag, publicada por su hijo y discípulo, Barúj Ashlag, titulado Shamati, contiene más de doscientos artículos que han sido copiados de las lecciones y conversaciones de Yehuda Ashlag.
Barúj Ashlag mantuvo este bloc de notas con él en secreto, hasta que en su lecho de muerte, en 1991. 






8 de febrero de 2008

Comunicado a mis lectores.

Profundizar un poquito más.

Estimados lectores, cada uno de los artículos posteados en este blog, como les he venido diciendo son productos de un camino recorrido. Cada titulo es por decirlo una duda que se ha generado en este camino, una inquietud, una clarificación. Muchos de los temas que aquí se tratan son de gran complejidad, y uno trata de escribirlos simples, sin simplificarlos. Aquí he incluido historias de Tzadik, definiciones de términos, link de paginas serias de gente capacitada, libros, y hasta muy pronto un curso de hebreo en formato Pdf.

Todo esto aunque se vea simple representa un esfuerzo, uno siente regocijo y alegría del estudio, no para exaltarse, ni vanagloriarse, sino de alegrase incluso de nuestros propios errores y en poder corregirlos. No para decir como me dijo en una ocasión una persona “El conocimiento te da poder” y se vincula a grupos desconocedores de esta Sabiduría y habla de ella (de modo equivocado e incorrecto) para generar en la gente una admiración hacia ella y hacia su propio Ego, y busca competir, como si las almas compitieran para ver quien llega primero, todos podemos caer en algún momento en esas actitudes, pero esa es la lucha, en regocijarse en los avances y en practicar, sobretodo practicar, lo que se estudia.

Porque quien se autodenomina de Sabio de la Kabbalah, ya la Torah lo define… y No todo el que tiene el conocimiento sobre la Kabbalah la entiende, reconocer que uno no sabe nada y continuar estudiando y practicando, es un paso enorme.

Yo por mi parte quisiera ir profundizando más y más dentro de mis posibilidades en esta sabiduría, la Kabbalah, prontamente también publicare una vez revisado, un glosario de términos generados de un estudio Guiado del libro titulado “La Esencia, el Infinito y el alma” de Rav Jaim Zukerwar. Así que se ira profundizando, y esta Blog irá creciendo.

Hay una serie de post sobre Kabbalah y la Lengua Sagrada, que fueron los semilleros de estos estudios míos y que se irán profundizando.

Les pido nuevamente que escriban sus comentarios, en los post, estos comentarios pueden ir generando, nuevos post, cada vez más mejores.

La Kabbalah no son fetiches, es una parte de la Torah. Debe ser tratada con devoción y respeto, y seriedad.

La Kabbalah.


Estudiar Kabbalah, sin cumplimiento de las Mitzvot.

Estimados lectores les invito a leer los siguientes artículos posteados hace un tiempo, lo único que tienen que hacer es click en los títulos, y cuando terminen de leer volver atrás.

¿Qué es la Kabbalah?


El Contacto con lo Sagrado. Parte I.


La Torah ¿Iniciación o Religión?.



Una persona me dijo una vez, que “La Kabbalah” volvía “Loca” a la gente, y que en muchos casos estos se tiraban al abandono, y andaban por las calles, perdiendo contacto con la Realidad si ha ocurrido pero ¿a que se debe esto?.

La Kabbalah, como hemos dicho anteriormente es la Dimensión interna de la Torah, por lo tanto el primer peligro del estudio de la Kabbalah radica en la noción de que es posible estudiar Kabbalah sin observar las Mitzvot. 

El pueblo Hebreo recibió la Torah en el Monte Sinaí sobre la base de su declaración "naasé venishmá" (Exodo 24:7) que significa "haremos y luego entenderemos". El hacer crea los recipientes, mientras que entender trae la luz o el alma adentro de estos recipientes. Es importante entender que el propósito definitivo por el cual Di-s creó el mundo fue la formación de los recipientes, viviendo una vida buena emulando a Di-s, la esencia de la Torah con sus 613 mandamientos para los judíos y los 7 mandamientos para la humanidad.

El intento de tener experiencias místicas o incluso proféticas sin crear los recipientes adecuados que los contengan es peligroso, porque es como crear "un alma sin un cuerpo". La mayoría de las veces estas mismas vivencias son simple ilusión, y no hay existe en realidad más que la imaginación de la persona trabajando. Pero si se vuelven reales entonces en esencia son el equivalente de la muerte, porque eso es esencialmente "un alma sin cuerpo". La importancia de crear recipientes se compara con la importancia del lugar que tiene la Torah en la vida. En este sentido, los mandamientos de la Torah "dan vida" (Levítico 18:5), o sea, hacen posible la vida al crear los recipientes en donde entre el alma.

La Torah nos cuenta acerca de grandes almas, como los hijos mayores de Aharon (el Gran Sacerdote, hermano de Moisés) Nadav y Avihu, que estaban inmersos plenamente en los más profundos misterios de lo Divino, pero, como no cumplieron con un mandamiento de Di-s, perecieron mientras servían en el Tabernáculo (Ibid. 10.). En Kabbalah, su error es descrito como "correr" hacia Di-s de manera demasiado entusiasta, sin el ancla provista por el cumplimiento apropiado de los mandamientos que permite a la persona permanecer "con los pies en la tierra", incluso al trascender los más elevados niveles de espiritualidad. Esta es la esencia del primer peligro: sin estar afirmado apropiadamente en la tierra a través del cumplimiento de las Mitzvot, la persona puede perder fácilmente contacto con la realidad.

Desde los tiempos del Baal Shem Tov, el estudio de la dimensión interior de la Torah se volvió permisible y hasta necesario para todos, tanto hombres como mujeres. Esto es especialmente cierto respecto de la Kabbalah en cuanto a su máximo nivel de revelación, el Jasidut. La Kabbalah como se manifiesta en el Jasidut es una necesidad para todos. El Rebe de Lubavitch escribe que la permisibilidad y la conveniencia del estudio de la Kabbalah, tal como aparece en el Etz Jaim del Arizal depende del grado de deseo que tiene cada persona en particular por este tipo de estudio. Para poder entrar de manera segura y salir de la huerta metafórica, el Pardés, es necesario estar bien protegido de semejante poderosa energía y bien asentado en la realidad a través del cumplimiento serio de toda la Torah.

El maestro no debe impartir la falsa concepción de que no es necesario comprometerse con la Torah toda cuando alguien desea aprender Kabbalah. Sin embargo, debe saber cómo cumplir con el legado del Baal Shem Tov, que incluso aquellos judíos que están lejos del estudio de la Torah estudien esta sabiduría, ya que muchos de ellos que crecieron lejos de la Torah no desean al principio asumir la responsabilidad de cumplir los preceptos.

El verdadero maestro de la Kabbalah ha de saber cómo tomar apropiadamente el riesgo de acercar a alguien a la Torah a pesar de que aún no esté preparado para cumplirla en su totalidad.

Este texto fue tomado y adaptado de la pagina del Rabino Ginsburg, "Dimensiones" puedes visitarla en los vínculos que te coloco en la parte Izquierda, y dice "La Dimensión Interior..."


7 de febrero de 2008

Rabi Moshé Cordovero

Uno de los más grandes Kabbalistas teóricos, y uno de los principales sistematizadores de la filosofía de la Kabaláh, fue Rabi Moshe Cordovero (1522-1570) de Safed, o Tzefat.

Tan respetado era que fue el primer Kabbalista en ser nombrado por las iniciales de su nombre, y aún hoy, los Iniciados lo llaman RaMaK. Hasta ese momento solo los grandes maestros Talmúdicos habían sido otorgados con esta distinción, teniendo el artículo “el” (la letra “He”) antes de sus iníciales para indicar que eran una sólida parte de la tradición.

El RaMaK nación en Safed, una ciudad sagrada por ser un centro de la Kabbalah. A edad muy temprana ya había ganado la reputación de genio extraordinario. Aparte de sus conocimientos de Kabbalah también era un erudito talmúdico y un filósofo de rango muy elevado, y fue sumamente respetado en esos campos.

Pero su interés principal fue la sistematización de la Kabbalah, otorgándole una estructura, un objetivo que había sido comenzado previamente por Rabi Iehuda Jait (1462-1529) y Rabi Meir Gabbai (1480-1547).

El Zohar había sido aceptado como fundamento de la Kabbalah, pero en su mayor parte, su sistema aparece complejo y desestructurado como la Biblia y el Talmud. Maimonides (RaMBaM ) pudo desentrañar y sistematizar el sistema filosófico de la Biblia y el Talmud, claramente delineando los principios organizadores que subyacen bajo su estructura. Lo que el RaMBaM hizo por la tradición convencional, el RaMaK lo hizo para la Kabbalah.

Al igual que Maimónides, el RaMaK defendió su sistema contra sus detractores, y en la mayoría de los casos sus palabras eran dirigidas contra aquellos filósofos que se rehusaban a aceptar la autoridad de la Kabbalah.

El RaMaK también estaba muy familiarizado con los elementos místicos de la Kabbalah. Era experto en los numerosos sistemas meditativos y Kabbalah práctica, y si bien, escasamente se refiere a esas áreas, hay suficiente material en sus escritos que indican dicha familiaridad.

El RaMak fundó una academia de Kabbalah en Safed, y hasta la aparición del Arí, fue considerado el rector de dicha escuela. Entre sus discípulos se contaban varias luminarias, incluyendo al Rabi Eliahu di Vidas y al Rabi Jaim Vital.

Fue sin dudas bajo el liderazgo del RaMaK que Safed se convirtió en el centro de la Kabbalah que el mundo jamás conocería; una ciudad cuyo solo nombre es sinónimo de Kabbalah.

Cordovero fue consagrado con la Smijáh, el honor académico más alto que podía ser otorgado a un individuo, y que indicaba que dominaba todas las áreas de la erudición talmúdica y legal a los 16 años de edad.

En 1541, a la edad de 20, el RaMaK oyó una vos urgiéndole comenzar sus estudios de Kabbalah con Rabi Shlomó Alkabetz. Fue iniciado en los misterios del Zohar y podía utilizar dicho texto en forma acabada. Para organizar el Estudio del Zohar en su mente comenzó a escribir dos libros. El primero, de reciente publicación “Or Iakar” (La Preciosa Luz), un gigantesco comentario al Zohar.

Su segundo libro fue su magnum opus.

Conocido como Pardés Rimonim se lo denomina actualmente el “Pardes”, y fue la sistematización de todo el pensamiento kabbalistico hasta ese momento. Un factor esencialmente importante fue el hecho de que el RaMaK reconcilió numerosas escuelas antiguas con las enseñanzas del Zohar, demostrando la unidad esencial de la Kabbalah.

Enseguida después de terminar el Pardes en 1548 el RaMak comenzó a involucrarse con la meditación “Gerushin” junto con otros discípulos.

Mes de ADAR I, año 5768. (6 febrero - 6 de marzo)

"Y vino la alegría entre los Judíos" (Ester)


Signo: Piscis.

Letra: kof, simboliza mascarada, un alegre disfraz, ocultar en un primer momento nuestra identidad, pretendiendo ser alguien distinto, total ocultamiento existencial del propio ser, con el objetivo de "hacer nacer" un ser completamente nuevo dentro de nosotros.

Tribu: Neftali.

Sendero: binah a Jesed

Mes de la alegría, Risas

Calendario, Parashat y Haftarah.

30 Shvat -1 Adar I (Febrero 5 – jueves Feb.7) – ROSH JODESH.


3 Adar I (Feb.8-9) - Trumah Shabat, la Torá Lectura: Ex. 25:1-27:19, Haftarah: Reyes 5:26 -6:13.


10 Adar Alef (15-16 Febrero) - Tetsaveh Shabat, la Torá Lectura: Ex. 27:20-30:10, Haftarah: Ezequiel 43:10-27.


14 Adar Alef (Feb. 20) - Purim Katan.


15 Adar Alef (Feb. 21) - Shushan Purim Katan.


17 Adar Alef (Feb.22-23) - Shabat Ki Tissa, Torá Lectura: Ex. 30:11-34:35, Haftarah: Reyes 18:1-39.


24 Adar Alef (febrero 29-1 de marzo) - VaYekahel Shabat, el Shabat Mevarchim, Torá Lectura: Ex. 35:1-38:20, Maftir Ex. 30:11-16, Haftarah I Reyes 7:13-26.


30 Adar Alef (marzo 7) - Primer día de Rosh Jodesh Adar

6 de febrero de 2008

El Besht

Israel ben Eliezer, el Baal Shem Tov, conocido popularmente como "Besht", nació en Podolia (Ucrania) en el año 1700.

Fue el fundador del movimiento espiritual dentro del judaísmo conocido como Jasidut, o jasidim. Sus observaciones y enseñanzas han fortalecido a la comunidad judía desde 1736. En ese año, a la edad de 36, él y su segunda esposa se mudaron a Medziboz, en donde vivió hasta que falleció en 1760.

Antes de mudarse a Medziboz, el Besht comenzó a forjarse un nombre para sí mismo como Baal Shem, "maestro del buen nombre". Fue un reconocido curador y obrador de milagros. Aprendió las propiedades naturales de hierbas y raíces usando sus conocimientos para volverse un sanador. También confeccionó amuletos.

En 1736 se "reveló" a sus seguidores, explicándoles que existe una forma alternativa de acercarse a Dios.

Los judíos de la época del Besht le dieron la bienvenida, ya que vivían en un momento de pogroms, masacres y falsos Mesías. El Baal Shem Tov enseñó que uno debería estar unido a Dios en todos los aspectos de la actividad diaria.

El aseveró que la Tefilá (plegaria) debe ser efectuada con Kavanah (devoción) completa y no hecha como si fuera rutina, sino más bien como algo especial.

También fue aceptado como un líder religioso y mentor ético. El Besht consiguió muchos seguidores y sus enseñanzas fueron populares pero no aceptadas por todos. Mucha gente de la comunidad judía establecida se oponía a él. Sus oponentes conocidos como los "mitnagdim", ridiculizaron y se opusieron a su acercamiento simple al judaísmo y a su reducido énfasis en los conocimientos de los textos sagrados.

Se estima que para el momento de su muerte, más de 10 mil personas seguían sus enseñanzas y predicamentos.

El movimiento jasídico del Baal Shem Tov todavía está vigente y en continuo crecimiento.

1 de febrero de 2008

Un bonita historia entre muchas feas.

Aunque realmente no me gusta reseñar noticias en este blog, no porque considere que es malo, o algo por el estilo, sino todo lo contrario, el Hombre Santo es aquel que es capaz de tener sus ojos fijos al cielo y los pies bien plantados sobre la tierra, pero este blog no fue diseñado para eso, me refiero para reseña de noticias de actualidad, pero en navegando en la red encontré una vieja (dijo “vieja” porque el hecho ocurrió en diciembre de 2007, hace ya más de un mes) y me pareció muy bueno para reseñarlo y sacar enseñanzas de esta, aunque encontré discrepancias de datos entre las fuentes (en español). Nuevamente no es mi intención trasladar de los foros que se encuentran en la red, las discusiones, infértiles en muchos casos, pero como siempre lo hago “te pido que si quieres dejar tu comentario hazlo, me encantaría”.

El hecho del cual les hablo ocurrió en diciembre cuando Walter Adler, 23 años, su novia (algunos medios dicen “esposa”) y dos amigos (todos ellos judíos) tomaron un tren subterráneo para viajar desde Manhattan hasta Brooklyn.

Cuando ingresaron al vagón, un grupo de turistas italianos (algunos de los medios les añaden el término “cristianos”) le gritaron “Feliz Navidad” y ellos le respondieron con un “Feliz Jánuca”.

La respuesta de los jóvenes alteró especialmente a uno de los pasajeros que, mostrando un tatuaje de Jesús en su cuerpo, se levantó y vociferó: “¡Jánuca fue cuando los judíos mataron a Jesucristo!”.

El grito encendió al resto del grupo y comenzaron a golpearlo violentamente.

Nadie de los viajeros en el tren hizo algo excepto un joven de 20 años musulmán de Bangladesh llamado Jasan Akri (otros le apellidan Askari) que defendió a la pareja judía y liberó el paso para que los judíos pudieran accionar el botón de emergencia, y llamar a la Policía. La policía detuvo (según una fuente 10 hombres) a los atacantes que fueron liberados poco tiempo después.

Un musulmán evitó una agresión en el metro de Nueva York. El estudiante defendió a cuatro judíos de una golpiza antisemita a manos de un grupo de “desadaptados”.

La hazaña del estudiante fue considerada heroica por el grupo salvado, que opinó que era un “milagro” que un musulmán ayude a unos jóvenes judíos, sin embargo, indicó que actuó de acuerdo con lo que sentía que debía hacer en ese momento y con lo que le habían enseñado en su familia.

A estas personas las llamo “desadaptadas”, porque un “cristiano” verdadero (que sigue radicalmente y no “fundamentalistamente” perdonen si no existe esta palabra) jamás atacaría violentamente a otro, Jesús no favoreció la violencia. Por el contrario, en el conocido "Sermón de la Montaña" de las Escrituras Cristianas, planteó con enorme vigor y radicalidad la alternativa opuesta, Los discípulos directos de Jesús y los de las generaciones inmediatamente posteriores entendieron su mensaje en su forma más original, evitando hacerse cómplices de toda violencia, con el pasar del tiempo los autodenominados “Cristianos” se alejaron de esta óptica, cometiendo barbaries y matanzas, de las cuales no es mi intención hablar aquí, ni polemizar, no lo permita D’os.

La ética o moral enseñada y practicada por Jesús no elude el conflicto, él no huyó del mismo, sino que le salió al encuentro y hasta en más de una ocasión lo provocó. Y además, estaba plenamente consciente de que todo su mensaje le creaba problemas al “orden establecido” de su tiempo. No obstante, persistió hasta las últimas consecuencias en el cumplimiento de lo que Él considero su deber, pero jamás ordeno a sus seguidores pelearse, ni mucho menos mostrar el pecho con un tatuaje de Él, y golpear a OTRO.

Son siempre los fundamentalistas tanto Judíos, Cristianos y Musulmanes los que causan problemas. Se escuchan historias horribles, de todos los lados, pero entre tanto horror aquí se ve claramente que “las buenas acciones” sobrepasan la religión.

En muchos países Judíos y Cristianos y Musulmanes conviven entre sí, y prosperan juntos.

Que halla Shalom en el Mundo.