26 de marzo de 2017

Hilo Rojo y la Kabbalah.


Al escribir este artículo se produjo un error, se publicó vacío, pido disculpas a los seguidores de la lista del blog, que seguro recibieron la notificación. 

En ninguna parte de la Kabbalah de Rabí Y. Ashlag tzl, y en la de su cuñado Rabí Brandwein tzl, hay una sola alusión al uso de supercherías, como hilos rojos, amuletos y cualquier cosa similar.

Para ellos la Kabbalah es corregir nuestros atributos egoístas, transformándolos en altruismo, y de esta forma alcanzar "la Equivalencia de Forma" con el Creador. Esto es lo que está escrito en todos sus textos.

Por otra parte, el hilo rojo es un elemento utilizado por personas supersticiosas, quienes suponen que al vestirlo los protege contra la envidia. 

El Hilo Rojo es una costumbre supersticiosa, y totalmente alejada de la esencia de la Torah, y su -dimensión interior- la Kabbalah.

El Mal de Ojo, efectivamente existe, es mencionado en el Zohar, incluso en el código de normativas -La Halajá- le dedican su espacio. El Ayin HaRá, esta asociado a la envidia, a los celos y a la falta de humildad.

A pesar de lo que digan, a pesar de lo que te quieran hacer pensar, aquellos quienes obran de tal manera, infringen la prohibición bíblica de practicar actos de superstición. 

Hay que ser un descarado, para argumentar sobre esto, y ser un profundo desconocedor de la Torah, para defender algo así. Seguro si algún seguidor de esta costumbre lee este artículo, me acusará de "enemigo de la Kabbalah", o de su institución de estudio. Lo que si es cierto es que El hilo rojo no tiene nada que ver ni con judaísmo, ni siquiera con la religión y ciertamente, mucho menos con la sabiduría de la Kabbalah.

El Hilo rojo es una superstición que proviene desde tiempos de antaño, oriunda de los emorreos. Ellos utilizaban esta cinta "contra la envidia".

Israel tiene prohibido creer en supersticiones:

 "Como las cosas de la tierra de Egipto, en la cual residisteis no hagáis, y como las cosas de la tierra de Kenaan a la cual os llevo, no hagáis, y según los estatutos de ellos no andéis" 
Levítico 18:3

Rabí Meir explica (en el Talmud), que los estatutos mencionados por el versículo en los cuales está prohibido regirse son, las costumbres supersticiosas de los emorreos que han sido enumeradas por nuestros sabios, por ejemplo: Rashi.

Increíblemente una de esas costumbres supersticiosas de los emorreos que han sido enumeradas es la de atarse una cinta roja en la mano (Rabí Tzadok en la Tosefta del tratado talmúdico de Shabat 8:4; Reshit Jojma, shaar Derej Eretz 4:16) 

¿Cúal es la forma más efectiva de protegerme de Ayin HaRá?

  1. Primero que todo reconocer al Único, sin Segundo. Agradecer al Eterno, porque reconocemos que nuestro bien proviene de Él.  
  2. Evitar ser arrogante, y hablar de las bendiciones que recibimos del Cielo. Es decir, modestia, honestidad y silencio.     
  3. Evitar a toda costa el generar en otros el sentimiento de envidia o celos. 
  4. Tener un temperamento apacible. 
 
La protección más efectiva contra el mal de ojo es vivir de acuerdo a lo que El Eterno desea, comportarnos con modestia, con bondad hacia el prójimo, y agradeciendo al Creador lo que nos otorga. Es decir teniendo: buen ojo.




 





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