Bendecir al Eterno es parte de la Emunah (disciplina) de Israel. Porque al reconocer las maravillas de la creación escapamos de la rutina, nos sobreponemos a las costumbres, y somos capaces de alcanzar estados de reflexión y actitudes profundas en nuestras vidas. Por eso debemos Bendecir a HaShem, al menos cien veces por día.
Las bendiciones (Berajot) se dividen en tres categorías, a saber:
Bendiciones de alabanza (Birkot HaSheBaj) mediante estas bendiciones agradecemos al Eterno por Su Amor y Generosidad, y le alabamos por Su Grandeza. Ejemplo a de esta categoría: la bendición Shejejeyanu, la bendición que se hace al ver un arcoiris, o al escuchar un trueno.
Bendiciones por el disfrute (Birkot haNehenín) Estas son las recitadas antes de comer, beber o antes de percibir aromas agradables.
Bendiciones por las Mitzvot (Birkot haMitzvot) son las que recitamos antes de cumplir una Mitzvat (precepto) como por ejemplo antes de tocar el Shofar, encender las candelas del Shabat.