"Es mejor el día de la muerte al del nacimiento" Eclesiastés 7:1
Las Mitzvot son acciones, se trata de hacer cosas o abstenerse de hacer cosas.
Cuando nosotros hacemos cualquier acción, o acometemos cualquier acto, probamos de que hemos comprendido lo concebido espiritual, mental y emocionalmente. Porque hasta que las ideas no se materializan en actos concretos son meramente intenciones.
El día en el que nacemos, somos sólo potencial, la espectativa de lo que seremos y haremos ¿Quién sabe si ese potencial culminará en acciones positivas?.
Cuando partimos es lo que ya hicimos, es la culminación de nuestra misión en la vida. Es cuando todos nuestros logros son culminados, y influimos en las vidas de los demás.
Hace muchos años leía el siguiente pasuk: "es mejor el día de la muerte al del nacimiento" Eclesiastés 7:1. Y no lo entendía... parece una sentencia depresiva o poco optimista. Pero entendí luego que cuando partimos de este mundo, ya hemos acumulado una gran cantidad de acciones, partimos llenos de Mitzvot, y buenas acciones.
Nuestra compañera Bao vivió una vida muy activa, fue ejemplo para muchos, e influyó a tantos más. Siempre se nos dice que no somos "a lo que nos dedicamos" pero Bao tenía gran sensibilidad por las personas, escogió dedicarse de manera muy seria a proteger a los más vulnerables, durante toda su vida luchó incansablemente por los derechos de todos, sin la necesidad ni siquiera de conocerlos. Fomentó de manera muy decidida el respeto a los demás, y mucho más formó a otros para que hicieran lo mismo. Y así es como la recordaremos una mujer trabajadora, una esposa para nuestro Compañero, una madre sensible, un ejemplo de que es posible superar todas las limitaciones sean cuáles sean. Nos enseñó que es real que un ser humano puede erradicar de su corazón toda la mezquindad, y el odio.
Ella demostró que tener orígenes humildes, no es excusa para vivir como una persona vulgar, no refinada, soes y desorganizada.
Se nos enseña que "el alma femenina" escoge venir a este mundo, y lo hace para ayudar a su alma gemela a crecer. Bao como la llamaba su esposo, y yo de igualadado, es una de las piezas que atraviesan el barco de babor a estribor y que sirven para aguantar los costados y sostener las cubiertas. Eso fue ella para él, ella mantuvo su integridad, ella lo ayudó a ser mejor persona, y no sólo a él, sino a su propio padre, a sus hermanos... Y para mí mismo, en mi caminar por esta vida. Demostró gran gallardía, templanza, soporte, misericordia y bondad.
Sacando las cuentas, Bao partió hacia el Creador, con un gran saldo, ella logró desarrollar su máximo potencial como alma, ella está ahora allá en los recintos del Rey de Reyes, y estoy seguro que Él, Bendito Sea, la mira con beneplácito. Desde allá nos mira a todos los que tuvimos el gran Honor de conocerla en vida.
Bao, Usted logró demostrarnos a todos que "Es mejor el día de la muerte al del nacimiento" Eclesiastés 7:1. Usted desarrolló todo su potencial y acumuló grandes riquezas espirituales.
Baruj Dayan HaEmet
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