24 de julio de 2011

Lenguaje de las Ramificaciones.



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El Lenguaje de las Ramas שפת הענפים

“Todo lo que existe en el plano físico de la Creación tiene su raíz y paralelo en la dimensión espiritual. Y lo contrario es cierto, nada existe en el plano físico sin antes existir en la dimensión espiritual y derivarse de ella”.


Al inicio de la Torah leemos, lo siguiente:



בְּרֵאשִׁית בָּרָא אֱלֹהִים אֵת הַשָּׁמַיִם וְאֵת הָאָרֶץ


En el Principio Dios Crea los Cielos y la Tierra.

Entendiendo que la Torah describe la creación en un lenguaje humanizado, para que el hombre materialmente limitado pueda comprender aspectos de orden superior y elevado, podemos inferir que el texto se está refiriendo a algo más allá del "cielo" y "tierra" físicos, los cuales son "consecuencias" que utiliza para describir las "causas" que dieron lugar a estos, empezando porque no dice "Cielo" sino "Cielos" en plural. 

Entonces a ¿Qué aspectos espirituales se refiere con Cielos y Tierra?

Calculando el valor numérico de las palabras, podremos encontrar luces sobre esto:

שָּׁמַיִם 390
291 אָרֶץ

Lo cual sumado es 681.

El valor numérico no nos dice nada hasta que no descubrimos el valor de las frases memalé kol almín "Rodea todos los mundos" y sovev kol almín "Llena todos los mundos"  

La suma de los valores numéricos de estas dos frases juntases 681. Dándonos a entender que nuestra percepción de la Presencia Divina de Di-s en la creación, Su luz inmanente e infinita que "llena todos los mundos", y de su Luz Trascendente que "abarca todos los mundos" es similar a nuestra percepción del Cielo y la Tierra.

Así la frase "Los Cielos y la Tierra" se refiere a las dos manifestaciones de la Luz Infinita de Dios, su Inmanencia y Trascendencia.

Y tal como se explica en el Tania.

"Porque cuando el intelecto en el alma racional contempla la grandeza del Eterno y se sumerge extraordinariamente en ella, El llena todos los mundos y cómo el abarca todos los mundos, cómo en su presencia, todo es considerado "nada", nacerá y surgirá en su mente y su pensamiento el sentimiento de reverencia por el Divino Rey, para temer y ser humilde ante su bendita grandeza, que no tiene fin ni límite y un temor al Eterno en su corazón. A continuación su corazón se encenderá con un amor intenso cual flameantes llamas, con una pasión, deseo, ansiedad y un alma anhelante por la grandeza del bendito Eion Sof. Esto es, pasión del alma, como está escrito: "mi alma te anhela, realmente se desvanece" (Tehilim 84:3) y "mi alma está sedienta del Eterno, (Tehilim 42:3) o "mi alma está sedienta de Tí" (Tehilim 63:2), esta sed, deriva del elemento fuego que hay en el alma divina. Tal como lo afirman los que estudian ciencias naturales y así figura en el árbol de la vida, el elemento fuego está en el corqazón, mientras que la fuente del agua y la humedad está en el cerebro. como se explica en Etx, Jayim, (el árbol de la vida), portal 50, es el nivel de jojmáh que es llamado " El agua del alma divina". Las restantes midót, son ramificaciones y derivados del temor y amor, como está explicado en otra parte". Sefer shel benionim Capítulo 3 



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